
Si esa decisión se convertirá en un arrepentimiento se sabrá en el futuro, dependiendo de si los AF son en los 2020 los artistas más valorados e idolatrados de la música popular, por haber resucitado al vegetativo cuerpo del rock, o si el descenso en calidad que percibí en su segundo disco, "Neon bible", continúa en "Suburbs", y pronto quedarán como otra banda con el "síndrome Strokes". O sea, un debut aclamado y al que muchos apuestan varias fichitas, que terminan cayendo en el ranking cual Gato Gaudio post-Roland Garros.
Pero probablemente, si la vida me vuelve a presentar la posibilidad de llevarme una copia en lustroso vinilo de "Funeral", no la vuelva a desaprovechar. Porque, ante todo, trae esta tremenda canción que de tan buena, logró que David Bowie hiciera una de sus últimas apariciones públicas: